imagen de Sebastián Jatz
OSCURO AMOR DE MUERTO
Por Jorge Martínez Mejía
Nadie ha
muerto.
Solo
vagábamos creyendo haber perdido el amor.
Solo
estábamos enfermos.
En el
lugar en que las estrellas brillan dócilmente,
aprendimos
a ver sonoros gritos,
más duros
y más
altos
y más
dolorosos que nuestro amor perdido.
Sólo éramos
cadáveres dormidos en un sueño
hecho
para otros muertos vivientes,
pero aún
alumbrábamos con la oscura y hueca forma de la muerte.
Aprendimos
a darle nuestra sangre rota
y
nuestras lágrimas a la peste,
a cada
pared,
a cada
rincón de nuestra noche madre indiferente.
Aprendimos
a iluminarnos
como
quien se da calor
sin más
braza que la de nuestros ojos pestilentes.
A la
deriva, en pequeños fragmentos,
mordiéndonos
con nuestros mismos dientes,
cortados
en trocitos,
nos
abandonó la muerte.
Nadie ha
muerto,
sólo era
amor,
oscuro
amor de muerto…
..............................
No hay comentarios:
Publicar un comentario