sábado, 17 de julio de 2010

La batuta oculta en el golpe de estado en Honduras


¿Sobre qué conversaban John Negroponte y Jacqueline Foglia Sandoval en su reunión en junio 2008?

“Ella es una arquitecta de la Muerte. Tiene piel de ángel pero alma de monstruo”
Berta Oliva, COFADEH

POR DICK y MIRIAN EMANUELSSON

TEGUCIGALPA / 2010-07-15 /

Entrevista con Berta Oliva, presidenta de COFADEH, El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras, sobre la acusación [1] de ROLAND VALENZUELA, ex ministro del Programa Nacional de Desarrollo Sostenible, PRONADERS del derrocado presidente Manuel Zelaya, en el sentido que JACQUELINE FOGLIA SANDOVAL, una ex militar graduado en Escuela de las Américas en West Point y que según [2] el ex comisionado por los derechos humanos, Leo Valladares, fue integrante del escuadrón de la muerte ‘Batallón 3-16’, sería la presunta arquitecta del Golpe de Estado Militar en Honduras el 28 de junio de 2009.

Pero no estaba sola. Según nuestras fuentes ya en el mes de junio de 2008, un año antes del golpe de estado, la ex militar se reunió con el “Hombre de la Muerte en Centroamérica”, John Negroponte, durante su visita en Honduras. No era una casualidad política que Negroponte llegara a Honduras en esos momentos. Manuel Zelaya había afiliado Honduras a Petrocaribe seis meses antes y faltaba solo dos meses antes de que el país centroamericano se incorporara como miembro al ALBA, odiado por el Imperio estadounidense.

El borrador golpista de Micheletti

Roland Valenzuela decía en la entrevista radial, que en los documentos que Jacqueline Foglia Sandoval olvidó en el Hotel San Martín y que un bartender entregó a Valenzuela, por que creía que él era del grupo de la ex 3-16 que se había concentrado allá, Valenzuela, relataba que el embajador Hugo Llorens (USA) estaba al tanto del golpe.

El 10 junio de 2009, es decir 18 días antes el golpe de estado, Roberto Micheletti enviaba el borrador a través Jacqueline Foglia Sandoval sobre el decreto que destituiría a Zelaya. Micheletti, nombrado dictador por el congreso nacional golpista el 28 de junio, pedía la opinión del cubano-americano Llorens.
El error fatal esa tarde en el Hotel San Martín, de perder toda la documentación acerca cómo los conspiradores hondureños y extranjeros planificaban un golpe de estado en Honduras, nos confirma que el enemigo que tenía el presidente Manuel Zelaya y el pueblo hondureño no era cualquier.
Y el 30 de abril 2010, cuando Roland Valenzuela puso las cartas en la mesa en cómo se planeaba y ejecutaba el golpe de estado que derrocó la frágil democracia en Honduras, estaba también consciente que sus declaraciones podría traerle la muerte. Y así fue. El 14 de junio, solo seis semanas después la entrevista, fue asesinado.

Suficiente elementos para iniciar procesos legales

Berta Oliva no es para nada sorprendida por las declaraciones de Valenzuela. Conoce quizás mejor que cualquier hondureña y hondureño quien era Jacqueline Foglia Sandoval y como actuaba en la oscuridad, creando “perfiles” del enemigo.

Y no es tampoco sorprendida que a pesar la declaración de Valenzuela no se ha abierto una investigación judicial en contra los acusados, lo que, dice, sería lo más normal en cualquier país en el mundo. Pero Honduras no se encuentra en una situación normal.

“Hay suficiente elementos para iniciar procesos legales ante tribunales nacionales”, dice cuando nos encontramos en la sede de Cofadeh en donde miles de victimas por la represión, tortura o familiares de personas desaparecidas han llegado para poner su denuncia.

¿“Que lo que sucede con esto? Sucede que esta creando acciones ya concretas de muerte. Por ejemplo; Cuando Roland Valenzuela dice que algo podría pasarle, él imagina que si, antes de dar y hacer la denuncia pública de lo que había encontrado o lo que le había entregado en el Hotel San Martín. Él había investigado quien era ella”, comienza.

El ‘Plan de Muerte’

“Nosotros (Cofadeh) habíamos tenido algunas acciones cinco días después el golpe donde publicamos un comunicado cuales eran nuestras preocupaciones. Por que supimos inmediatamente que ella estaba muy involucrada y muy metida en el diseño del Plan de Muerte que estamos viviendo en Honduras ahora y que se iniciaba con el golpe militar de estado que se le dio a Zelaya”.

“Y al darse el golpe militar de estado estábamos convencidos que si estaban personas como ella y Billy Joya de analistas políticos que en los años -80 habían actuado juntos. Y que habían hecho un buen equipo para primero dar seguimientos y luego para torturar y desaparecer personas. La justicia no fue capaz nunca de alcanzarlos y que ahora estaban en ese proyecto unidos. Era lógico que el resultado iba a ser lo que tenemos; un Roland Valenzuela asesinado y un centenar de hondureños muertos con tal fineza que nos esta costando mucho a identificar a los responsables políticos arquitectos”.

“Pero como no se quiere iniciar el juicio y castigo va a ser casi imposible en este momento con las actuales autoridades lograr justicia para ellos. Pero lo que si podemos lograr, es tener los antecedentes, y ya están, y las actuaciones actuales y en cualquier tribunal e internacional poner alertas. Por que yo creo que a los que conspiran contra la muerte, los que diseñan contra la muerte debemos desatar persecución mundial. Y que no haya pasto en el planeta en que puedan reposar en paz. Por que son demasiados hechos que se han dado y no podemos callarnos por el temor.

¡Que hable Jacqueline F. Sandoval!

Nosotros hemos contactado y buscado a la señora Jacqueline Foglia Sandoval varias veces, tanto en su celular personal como en su telefono de trabajo. Pero sin éxito. La invitamos públicamente para que enfrenta las acusaciones de Roland Valenzuela, Radio Globo y Berta Oliva.